Recuerde el alma dormida, avive el seso y despierte, contemplando cómo se pasa la vida, cómo se viene la muerte tan callando; cuán presto se va el placer, cómo, después de acordado, da dolor; cómo, a nuestro parescer, cualquiera tiempo pasado fue mejor.
"Como todas las novelas que ha escrito David Toscana me pareció muy bueno el tema... Recomiendo su lectura..."