un libro potente e inolvidable sobre el duelo pero tambin sobre elamor y las palabras para tratar de atravesarlos y nombrarlos. En laestela de Didios y Barthes.Este libro comienza con las siguientespalabras: Avanzamos temblando. Hay algo delicado, fr gil y, al mismo tiempo, contundente en la escritura de Lger, que intenta respondersi es posible contar la muerte de una persona amada. ,En la l¡neade libros como ,El a¤o del pensamiento m gico ,de Joan Didiono ,Diario de duelo ,de Roland Barthes (de quien casualmenteLger era una de sus disc¡pulas predilectas), ,En busca delcielo ,se atreve a habitar el hueso del dolor y la prdida. Elespacio donde est s ya es inaccesible, ya no existes, c¢mo entendereso, ,ya no existes, grito. A travs de la escritura, aquelloimposible de entender se condensa, se densifica, como si narrar estamuerte fuera la £nica manera que tiene Lger de integrarla a su vida.La autora de ,Sobre Barbara Loden ,logra escribir sobre eldolor con inusual belleza. ,Lger se resistea caer en los lugares comunes a los que, como una pendiente empinada,parecieran empujarla los hechos. ,Los gestos teatrales, el llanto, las genealog¡as de la lamentaci¢n. ,Pasa por ah¡, pero no es losuyo. M s bien intenta darle voz a un inventario imposible: lo quehay, lo que ya no hay, qu es lo que queda de ese otro que fue hastahace unos segundos lo m s importante. Da lugar al cuerpo y tambin alalma. A veces lo llama l, a veces t£. A veces usa el presente, aveces el pasado. ,No se puede saber nada del amor ni se puedesaber nada tampoco sobre la muerte, dice. Se detiene en lo incierto,lo que no est en ning£n lado, lo que se esfuma.DEL PRÓLOGO DEMERCEDES HALFON