La educación musical se mueve, y lo hace en la línea de que sea el alumnado el partícipe activo de su aprendizaje. El libro presenta una recopilación de experiencias que incluyen ya las metodologías activas y recursos que dirigen el cambio educativo, que en los últimos años se viene fraguando de manera imparable en la educación. Y es que el área de educación musical es de las primeras en liderar el timón del cambio necesario, convirtiendo a las personas, a las que enseñan, en el centro y haciéndolas responsables de su aprendizaje.