Cuando vimos por primera vez el libro de Cristóbal Valenzuela Berríos, La Ciudad se llama Cafeína, recordamos inmediatamente la referencia que hace Gaston Bachelard en su Poética del Espacio a Fragmentos de un diario íntimo de Rilke, cuando junto a dos amigos advierten en la noche profunda: La ventana iluminada de una cabaña distante, la última cabaña, la que está sola en el horizonte ante los campos y los estanques [ ] Aunque estábamos muy cerca unos de otros, seguíamos siendo tres aislad