Tal vez sepamos y hayamos querido olvidar que lo cierto de la naturaleza del ser humano viene definido por el transcurso infinito de un concepto temporal que coincidiría aproximadamente con un sentido más amplio y diverso de la palabra muerte; ámbito sin comienzo ni al final dentro del que lo que en un presente teórico perc ibimos como estado consciente de vida --como si, en contraposición a ese referente ete