En uno de los miuchos cuadernos de dibujo que el pintor Manuel Alcorlo guarda en su estudio aparecen una serie de mujeres desnudas,code ndose con diferentes animales de compa¤¡a, en una suerte derefinada simbiosis bestialista. A partir de ese material gr fico, Luis Alberto de Cuenca asumi¢ el reto de redactar una historia po‚tica enveinticinco brev¡simos cap¡tulos. Hay dos protagonistas: un vampiro?alter ego del poeta, que es quien monologa de forma fragmentaria encada uno de estos recortes l¡ricos? y una mujer ?insignia de todas las mujeres, que permanece en silencio?. El resultado es tan originalcomo sorprendente. Un aut‚ntico regalo para los sentidos confeccionado con el amor inmortal que acostumbran a poner en todas sus obras losvampiros.eras cuatro novelas de la serie.t n relacionados m sdirectamente con el trabajo profesional y cuyo conocimiento puedefacilitar al profesor/a un mejor desempe¤o docente dentro y fuera delaula. n Internacional, vio como Picasso pintaba el Guernica, sereencontr¢ con Ugarte, con Antonio Bonnet o con Gori Mu¤oz. Y devuelta a Par¡s, en su primer exilio, ya casada con Gori, mientrasesperaba lo que le deparara el destino, con Garc¡a Ascot, F‚lixAlonso, Corpus Barga, Alejo Carpentier, Lucho Vargas, Esteban Franc‚so David Alfaro Siqueiros.