Ilse ha decidido fugarse de casa, la única persona que lo sabe es su hermana Érika, quien le gurda el secreto hasta que las cosas empeoran y se resquebrajan los sentimientos. Contada desde la perspectiva de una niña, esta historia se sumerge en el mundo de las relaciones familiares complejas, donde muchas formas de violencia se ejercen y terminan por desenmascarar el modelo perfecto de hogar. El final aplastante deja en suspenso el destino de los personajes, especialmente porque , especialmente porque Ilse trae consigo los signos de una tormenta.