Este libro es el interesante y entretenido relato de Camila Cariaga, a quién siempre le gustó escribir y también salir a comer. Por lo mismo encontró que crear un blog para contar sus experiencias gastronómicas, podía ser un hobby entretenido. Y no más que eso, porque ella no era una especialista, no sabía nada de cocina y menos de redes sociales.