Shino Ôshima es “incapaz de decir su propio nombre”. Pese a todo, consigue hacer su primera amiga desde que entró en el instituto. Entonces empieza a comunicarse, aunque sea torpemente, encontrando siempre las palabras exactas demasiado tarde, cuando ya todo ha pasado. Pero bueno, la juventud también resplandece para los que son más torpes... ¿O no?
"Una buena Obra de Shuzo Oshimi, idealmente leerlo de una sola sentada, puesto que es una linda historia cargada con los aspectos psicologicos que le gusta abordar al autor."