Parece ser que nos encontramos ante una enfermedad que es solamente un proceso de la involución, del mismo modo que lo son la pérdida de la memoria, el pelo cano, la disminución de la agudeza visual y la disminución auditiva. Una vez instaurada paulatinamente en el organismo parece hacerlo de forma definitiva, pero esta es una conclusión errónea que trataremos en este libro.