El prólogo es lo que se refiere a hechos anteriores o a reflexiones relacionadas con la obra, es decir, el prólogo es lo primero, y para mí siempre lo primero es el agradecimiento a aquellas personas que me han ayudado a poner por escrito mis sueños, ya sea con su ilusión, con su ingenio, con sus ideas o incluso con aportaciones críticas. El primer agradecimiento, y al mismo tiempo reconocimiento a su labor, es para Alex Peña Merino por la fotografía que es la base de la portada de este libro y por el diseño de la misma. También me enorgullece incluir en esta colección una historia de Cristina Peña Merino. Es su primera narración breve, pero sorprende por su intensidad y por la fuerza moral con que, en pocas líneas, de manera natural, desarrolla una historia tremendamente actual, que emociona al mismo tiempo que nos hace sentirnos involucrados.